Todos sabemos los riesgos que corre nuestra higiene cuando comemos fuera de casa. El el siguiente video se ve a unos empleados de Kentucky Fried Chicken en Malasia exprimiendo el aceite sucio que se pega en sus grandes estufas dentro de las ollas freidoras. Se esperan las declaraciones oficiales de la compañía sobre sus políticas de salubridad.
Debe aclarase que no hay riegos de infecciones pues las altas temperaturas eliminan esta posibilidad, pero el aceite reutilizado, sobre todo el aceite contaminado, ocasiona graves consecuencias para el metabolismo, siendo el aparato digestivo y el corazón los principales afectados. Sin hablar de la grave falta ética en la que incurren los empleados que, dicho de manera sencilla, faltan a la regla de oro, "No hagas a otro lo que no quisieras para ti".
Miren atentamente la cruz en el centro de la pantalla. Mientras el vídeo se reproduce, y sin retirar la vista de la cruz, notarán que las chicas que aparecen a ambos lados lucen realmente feas, hasta monstruosas. Al terminar de reproducir el vídeo, pueden repetirlo mirando ahora las chicas. Notarán que hay unas más agraciadas que otras, pero ninguna es tan fea como parecía en un principio.
El Estudiante Universitario Sean Murphy hizo este descubrimiento por accidente, ocurre al momento de alinear ambos rostros con respecto a nuestros ojos. El cerebro de alguna manera compara ambas caras y exagera aspectos como el tamaño de los ojos, la frente o la barbilla. Esto sólo ocurre al cambiar de rostros sucesivamente.
Esta hermosa bebé coreana nos recuerda con sus tiernas sonrisas que dormir es delicioso y muy saludable. Después de una dura jornada laboral no es mala idea recordar a esta nena, dejarse seducir por sus insinuaciones y mirar para adentro un rato. Que descansen.
